domingo, 20 de junio de 2010

UPM/Botnia y la lucha antiimperialista de la región.

Para analizar con seriedad este tema, veamos que es, sino una invasión del capital multinacional, este proyecto.

¿Los beneficios? Por ningún lado, me remito a todos los estudios de Guayubira, Redes Amigos de la Tierra, RaPal, todas las Coordinadoras desde Mercedes, pasando por Colonia, llegando a Montevideo, que en estos últimos años han generado multiplicidad de documentación sobre el impacto negativo, la extranjerización y degradación de las tierras, la no generación de mano de obra real con esta penetración imperialista, el agravamiento de la vida de la pequeña producción en el campo con su corrimiento a la ciudad.

Agreguémosle además los estudios de nuestra prestigiosa Facultad de Química de UDELAR donde se alerta sobre la necesidad de la preservación de los recursos naturales (calidad de las tierras, aguas dulces y el aire), frente a la presencia de este tipo de mega emprendimiento impuesto a prepo por la clase política casi al unísono.

Ahora, mas allá del alcance en movilización desde el lado uruguayo, que la hubo a contracorriente del pensamiento oficial único, que por cierto demostró que la clase política 'uruguaya' está unida en el propósito de entregar soberanía en componenda con los imperialismos, sin importarle para nada las sufridas condiciones de existencia de vida de las clases oprimidas y explotadas, pero sin medir también para nada, es mas, acoplándose a una intencionalidad destructiva del medio ambiente, muy acorde con el rumbo que lleva el imperialismo en su apetito voraz para la destrucción de la habitabilidad del globo terráqueo.

Como será que hasta ellos, o algunos de ellos se comienzan a asustar, pero en esa contradicción entre la explotación y expoliación de los recursos naturales frente a la posibilidad de la autodestrucción, optan- como no puede ser de otra manera en la mentalidad, en el núcleo de la ideología burguesa egoísta, que prefieren el segundo camino, o por lo menos le dan a mansalva hasta donde de la cuerda.

Nunca los burgueses van a pensar en los siete mil millones de habitantes, en su supervivencia sí, como clase o como unos pocos. ¿Que esconderán bajo la manga para su salvación estos hijos de puta de la burguesía imperialista depredadora?

Por otro lado tenemos en la región la heroica lucha de un pueblo, donde mancomunadas varias clases, incluso alguna entreverada en el montón, como esos grandes sojeros, en el ejemplo HEROICO DE GUALEGUAYCHÚ, pueblo alzado como en las épocas de Artigas, heredero de las mejores tradiciones artiguistas de unidad y lucha en la calle y en asamblea permanente, QUE SUPO ENFRENTAR ESTOICAMENTE LOS DESIGNIOS IMPERIALES.

Hoy Facundo, desde Buenos Aires, se me adelantó en Postaportenia Nro. 367, haciendo un alegato donde dice sencillamente que Gualeguaychú ha sido la alarma frente a dos gobiernos claudicantes, pero además como disparador de la lucha ambientalista por toda la Argentina.

Y, ¿alguien desde el punto de vista marxista puede negar que esta lucha ambientalista, con gente movilizada, no forma parte de la lucha antiimperialista?

Pues yo digo como decía Mao: MUY BIEN, MUY BIEN. Asustarse de la gente movilizada no es de marxistas revolucionarios, no es de marxistas-leninistas, no es de marxistas-leninistas - maoístas.

Discrepo entonces con el pensamiento mecanicista de W. Yohai, que en el Nro 366 de Postaportenia, hace referencia a una verdad desde el punto de vista marxista, dice.

Deben considerarse entonces todos los aspectos en lucha y cual es la contradicción principal, la lucha del pueblo regional contra el proyecto imperialista, aunque éste pase en gran medida solo por la faceta del medio ambientalismo. Es de los marxistas revolucionarios que tengamos la habilidad de movernos 'como pez en el agua' entre las masas para plantear a fondo aquí o en la región, la cuestión nacional antiimperialista, rasgo principal de lucha en esta época.

Aprender a no ser mecánicos en esta época, lastre seguro de tanta influencia del reformismo clásico, pero principalmente de quienes se arrogaron durante décadas en Uruguay, ser marxista-leninistas, los ' revisionistas' arismendianos democratistas, que no veían mas allá de sus narices en cuanto a revolucionar el pensamiento y la realidad con el arma formidable del materialismo dialéctico y el materialismo histórico.

Aquellos sí acostumbraron a buena parte de nuestros intelectuales a no ser demasiado revolucionarios, así estamos hoy en Uruguay hablando una clase media política de un levantamiento de un corte de puente, cuando esto es lo que menos importa, debido a que no deja de ser solamente una medida de lucha…EN MEDIO DE UN GRAN ALZAMIENTO AUN POR DESCIFRAR DE UN PUEBLO Y UNA REGIÓN QUE SIGUE CONVULSIONADA POR LA IMPOSICIÓN DE ESE ENCLAVE AFIN CON LOS INTERESES DE LA OLIGARQUÍA PROIMPERIALISTA DOMINANTE.
Firma:
Julio Pérez
20/6/2010

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